LOS SIETE RETOS DE LA COMUNICACIÓN

Cómo se originó este manual, mi búsqueda sobre los SIETE RETOS y cómo nos beneficiamos de un estilo más cooperativo de escuchar y hablar

Buscando lo que es más importante. Este manual propone siete maneras en que puedes guiar tus conversaciones en direcciones que sean más satisfactorias tanto para tí como para tus compañeros de conversación.  He seleccionado estas sugerencias del trabajo de un grupo amplio de maestros de comunicación, terapistas e investigadores en muchos campos. Aunque estas siete destrezas no son todo lo que una persona necesita saber sobre hablar, escuchar y resolver conflictos, pienso que son una parte grande y valiosa de estos procesos y un gran lugar para comenzar.  

El campo de comunicación interpersonal sufre de un tipo de “vergüenza de ricos.”  Existe tanto consejo bueno que dudo que cualquier ser humano pueda seguirlos todos.  Para citar uno de muchos ejemplos, temprano en los 90’s la entrenadora en comunicación Karen Anderson escribió un libro buenísimo sobre la negociación que incluía cien formas específicas de conseguir más de lo que quieres.  El problema es que nadie que conozco puede mantener una conversación y malabarear cien consejos en su mente al mismo tiempo.

De modo que, detrás de todos esos consejos buenos está el tema de prioridades: ¿Qué es más importante para enfocarse?  ¿Qué tipo de acciones tendrá el mayor número de efectos positivos en la vida de las personas?  Este manual es mi esfuerzo de contestar esas preguntas.  Mi meta es resumir lo que muchos piensan que son los principios más importantes de la buena comunicación interpersonal y describir estos principios en formas que los hagan fáciles de recordar, adoptar y entretejer juntos.  Mucha de la información en este manual ha sido conocida por décadas, pero eso no quiere decir que todos se hayan podido beneficiar de ella.  Este manual es mi contribución para cerrar esa brecha.

Cómo nos beneficiamos de aprender y usar un estilo más cooperativo.  He seleccionado para este manual los siete pasos más poderosos, gratificantes y retantes que he descubierto en mi propia lucha para conectar con la gente y sanar las divisiones en mi familia.  Nada de esto fue natural para mí, dado que vengo de una familia que incluye personas que  no se hablaron por décadas entre sí.  El esfuerzo me está trayendo algunos de los resultados buenos en la lista a continuación (y todavía estoy aprendiendo.)  Estos son los beneficios que están esperando ser despertados por la varita mágica… de tu estudio y tu práctica.

Has más cosas, diviértete más, que también se puede expresar como coordina mejor tus actividades diarias con las actividades diarias de aquellos que son importantes en tu vida.  Vivir y trabajar con otros son actividades de comunicación intensiva.  Mientras mejor comprendemos lo que otra gente está sintiendo y queriendo y mientras más claramente los demás comprenden nuestras metas y sentimientos, más fácil será asegurarnos de que todos están empujando en la misma dirección.

Más respeto.  Dado que existe mucha imitación mutua en la comunicación diaria (yo levanto mi voz, tú levantas tu voz, etc.), cuando adoptamos una actitud más compasiva y respetuosa hacia nuestros compañeros de conversación, les invitamos e influenciamos a que hagan lo mismo hacia nosotros.  

Más influencia.  Cuando practicamos la combinación de honestidad responsable y atención recomendada aquí, es más probable que podamos atraer a otros y conseguir acuerdos con los que todos podamos vivir, es más probable que consigamos lo que queremos y por razones de las que no nos arrepentiremos más tarde.

Más cómodos con los conflictos.  Dado que cada persona tiene talentos diferentes, se puede ganar mucho si las personas trabajan juntas y consiguen juntas lo que nadie podría conseguir por sí solo. Pero, dado que cada persona también tiene necesidades y visiones diferentes, siempre habrá algún conflicto al vivir y trabajar con otros.  Al comprender más de lo que ocurre en conversaciones, podemos convertirnos en mejores solucionadores de problemas y navegadores de conflictos.  Aprender a escuchar a otros más profundamente puede aumentar nuestra confianza de que podremos entablar un diálogo en el que se da y se recibe genuinamente y podremos ayudar a generar soluciones a problemas que cubran más de las necesidades de todos.

Más paz mental. Dado que cada acción que tomamos hacia otros se mantiene en nuestras mentes y cuerpos por meses (o años), adoptar una actitud más pasiva y creativa en nuestra interacción con otros puede ser una forma significativa de disminuir nuestros propios niveles de estrés.  Aún en situaciones desagradables nos podemos sentir bien sobre nuestras respuestas tácticas.

Cercanía más satisfactoria con otros. Aprender a comunicarnos mejor nos envolverá en la exploración de dos grandes preguntas: “¿Qué está pasando dentro de mí?” y “¿Qué está pasando dentro de tí?”  La vida moderna está tan llena de distracciones y entretenimientos que muchas personas no conocen bien sus propios corazones, ni los de aquellos a su alrededor.  Los ejercicios sobre escuchar nos pueden ayudar a escuchar con más cuidado y asegurar a nuestros compañeros de conversación que realmente comprendemos por lo que están pasando.  Los ejercicios sobre auto-expresión nos pueden ayudar a pedir lo que queremos más clara y calmadamente.

Una vida más saludable.  En el libro “Love and Survival” [3], el Dr. Dean Ornish cita numerosos estudios que apuntan a las relaciones de apoyo como un factor al ayudar a personas a sobrevivir enfermedades terminales.  En el grado en que usamos destrezas de comunicación cooperativa para dar y recibir más apoyo emocional, aumentaremos grandemente nuestras posibilidades de vivir vidas más largas y saludables.

Respetando la montaña que vamos a escalar juntos: por qué el aprender a hablar y escuchar de manera distinta es retante.

Es mi esperanza que el poner en práctica estas sugerencias te sorprenderá con conversaciones agradables y desde el corazón que nunca imaginaste que serían posibles, tal y como yo me sorprendí. Pero al mismo tiempo, no quiero dar a entender que aprender nuevas destrezas de comunicación es fácil.

Desearía que las destrezas descritas en este manual pudieran ser presentadas como “Siete Maneras Fáciles de Comunicarnos Mejor.”  Pero en realidad, las recomendaciones que sobrevivieron a mi escrutinio demandan mucho esfuerzo.  Por respeto a tí, siento la necesidad de decirte que hacer cambios grandes y positivos en la forma en que te comunicas con otros probablemente será una de las tareas más satisfactorias y difíciles que decidas hacer, similar a escalar el Monte Everest.  Si te diera la impresión de que estos cambios son fáciles de hacer, te haría vulnerable a desanimarte con la primera cuesta empinada que te encuentres.  Mi esperanza más profunda es que si comprendes las siguientes cuatro razones por las cuales aprender nuevas destrezas de comunicación es retante, esa comprensión te ayudará a ser más paciente contigo mismo y con otros y te ayudará a perdonarte más a tí mismo y a otros.

Primero que todo, aprender mejores destrezas de comunicación require mucho esfuerzo porque la cooperación entre personas es un proceso mucho más complejo y mentalmente demandante que la coerción, amenazar o simplemente agarrar lo que quieres. Las necesidades de dos personas (o muchas) están envueltas; no solo las necesidades de una persona. Y pensar sobre los deseos de dos personas (y cómo esos deseos pueden entrelazarse) es un paso gigante más allá de simplemente sentir nuestros propios deseos.

El viaje  que va desde pelear por el patito de hule hasta aprender a cómo compartirlo es el viaje más largo que un niño jamás hará; es un viaje que nos guía mucho más allá de la niñez. Obtener este nivel más alto de destrezas y satisfacción con la vida y en el trabajo con otros requiere esfuerzo, atención consciente y práctica con otras personas.

Una segunda razón por la que aprender destrezas de comunicación más efectivas y satisfactorias no ocurre automáticamente es que nuestra forma de comunicarnos con otros está profundamente entrelazada con nuestras personalidades, en la historia de nuestros corazones.  Por ejemplo, si cuando yo era pequeño alguien me dio en la cara o me gritó cada vez que yo hablaba y expresaba un deseo u opinión, entonces probablemente yo desarrollé una aversión sensible a hablar sobre mis pensamientos o sentimientos.  Puede que sea verdad que nadie me va a dar ahora, pero muchas de mis células cerebrales quizás no lo saben todavía. Así que aprender nuevas formas de comunicación nos envuelve en el aprendizaje de nuevas formas de sentirnos en y sentirnos sobre todas nuestras relaciones personales.  Podemos convertirnos en más confiados y menos temerosos, con más destrezas y menos torpes, más comprensivos con otros y menos amenazados por ellos.  Los cambios tan significativos como éstos ocurren a lo largo de meses y años en vez de en un solo fin de semana.

Un tercer lado de la montaña de la comunicación concierne la auto-observación.  En el curso de la vida, nuestra atención generalmente se enfoca en los demás y en el mundo alrededor nuestro. Mientras hablamos y hacemos chistes, consolamos a otros y negociamos con ellos, usualmente nos perdemos en el curso de la interacción.  Comunicarnos más cooperativamente envuelve ejercer una influencia gentil para guiar las conversaciones a finales más felices para todos los participantes.  Pero para poder guiar o manejar un proceso en creación, una persona necesita poder observar ese proceso. ¡Así que comunicarnos más cooperativamente y más satisfactoriamente requiere que aprendamos cómo participar en nuestras conversaciones y observarlas al mismo tiempo!  Toma algo de tiempo acostumbrarse a esta participación y observación al mismo tiempo. Al principio miramos atrás a conversaciones que hemos tenido y tratamos de comprender qué fue bien y qué fue mal en ellas. Gradualmente podemos aprender a traer esa “conciencia de nuestras observaciones” a nuestras conversaciones.

Una razón final (cuatro deben ser suficientes) por la que aprender nuevas destrezas de comunicación toma mucho esfuerzo es que estamos rodeados por una inundación de malos ejemplos. Todos los días, las películas y la TV nos ofrecen una corriente contínua de imágenes vivas de sarcasmo, peleas, crueldad, miedo y caos. Y tal y como los anuncios de cerveza y cigarrillos han probado más allá de cualquier sombra de duda, puedes lograr que millones de personas hagan algo con solo mostrar suficientes imágenes vívidas de personas que ya lo están haciendo.  Así que a un nivel bien profundo, estamos siento educados por los medios de comunicación a fallar en nuestras relaciones [5].  Por cada película sobre personas logrando la paz entre ellos, aparecen cien películas sobre personas peleando hasta matarse, con cadenas o literalmente pateándose las caras, acciones que no te ayudarán a tí o a mí a resolver problemas en nuestras casas o trabajos. Aprender a relacionarnos con otros generalmente envuelve seguir ejemplos, pero nuestros ejemplos de destrezas interpersonales y compasión son pocos y alejados entre sí.

Estas son las razones que me han llevado a ver el aprendizaje de nuevas destrezas de comunicación como un compromiso demandante. Mi esperanza es que veas el mejoramiento de tus destrezas de comunicación como un viaje largo, precido a cruzar una cadena de montañas para que te comprometas con poner atención y esfuerzo al proceso y, por lo tanto, le saques más provecho.

     Al "ser el cambio que quieres ver"

puedes empezar a cambiar la calidad

 de tus conversaciones sin esperar a

que otras personas cambien.

Vivir una vida humana completa es sorprendentemente similar a jugar pelota o tocar el violín.  Mejorar en cada uno requiere práctica continua. Probablemente ya aceptas este principio en relación a muchas actividades humanas. Espero que este manual te anime y apoye al aplicarlo a tus propios procesos de hablar, escuchar y hacer preguntas.

Siete formas de ser el cambio que quieres ver.

Dado que las conversaciones son un “traer juntas” las contribuciones de ambas personas, cuando inicias un cambio positivo en tu forma de hablar y escuchar, puedes por tí solo(a) empezar a cambiar la calidad de todas tus conversaciones.  Las acciones descritas en este manual son siete ejemplos de “ser el cambio que quieres ver” (una frase que recientemente ví atribuída a Mahatma Gandhi, el gran maestro de la no violencia.)

Aunque esto puede sonar bien idealista y de auto-sacrificio, también lo puedes comprender como un principio práctico: modela la conducta que quieres provocar en otras personas.  Los Siete Retos son también ejemplos de otra frase de Gandhi: “los medios son los fines.” Comunicarnos más conscientemente y compasivamente puede ser un fin satisfactorio en sí mismo, tanto emocional como espiritualmente. También construye familias más felices y negocios más exitosos.

Un resumen corto de cada reto se incluye en los siguientes párrafos, junto con algunos de los temas de vida de desarrollo personal que están enlazados en cada uno de ellos.  En los Capítulos Uno al Siete encontrarás descripciones expandidas de cada uno con discusiones, ejemplos, ejercicios y lecturas que te ayudan a explorar cada sugerencia en acción.

Reto 1. Escucha más cuidadosamente y responsivamente.  Escucha primero y reconoce lo que escuchas, aún si no estás de acuerdo con eso, antes de expresar tu experiencia o punto de vista. Para conseguir más de la atención de tu pareja de conversación en situaciones tensas, presta atención primero: escucha y repite brevemente lo que escuchaste (especialmente los sentimientos) antes de expresar tus propias necesidades o posiciones. El tipo de escuchar recomendado aquí hace diferencia entre reconocer y aprobar o estar de acuerdo. Reconocer los pensamientos y sentimientos de otras personas no tiene que significar que apruebas o estás de acuerdo con las acciones de esa persona o su forma de experimentar o que harás cualquier cosa que la persona pida.

Algunos de los niveles más profundos de este primer paso incluyen aprender a escuchar a tu propio corazón y aprender a encontrar identidades e integridades bien diferentes de las tuyas, mientras te mantienes centrado en tu propio sentido del yo.

Reto 2.  Explicando tu intención en la conversación e invitando consentimiento.  Para ayudar a tu pareja en la conversación a cooperar contigo y reducir posibles malos entendidos, comienza las conversaciones importantes invitando a tu pareja de conversación a unirse a tí en el tipo de conversación específico que quieres tener. Mientras más significado tenga la conversación para tí, más importante es que tu pareja de conversación comprenda la pintura completa. Muchos comunicadores exitosos comienzan conversaciones especiales con un prefacio que va algo así: “Me gustaría hablar contigo por unos minutos sobre [tema de la conversación].

¿Cuándo será un buen momento?” El ejercicio para este reto te estimulará a expandir tu lista de conversaciones posibles y a practicar comenzando con una variedad amplia.

Algunos niveles más profundos de este segundo paso incluyen aprender a ser más conscientes y honestos sobre nuestras intenciones, gradualmente desechando las intenciones para herir, humillar o castigar y aprendiendo a tratar a los demás como iguales cuya participación en conversaciones con nosotros es un regalo y no una obligación.

Reto 3.  Expresándote más claramente y completamente.  Disminuye la velocidad y dale a quien te escucha más información sobre lo que estás sintiendo o viviendo usando una amplia gama de “oraciones con YO.”  Una forma para ayudar a conseguir la empatía de quien nos escucha es expresar más de las cinco dimensiones básicas de nuestra experiencia.  En la próxima tabla encontrarás un ejemplo usando los cinco “mensajes con YO” más importantes identificados por varios investigadores en la última mitad del siglo.  Por favor lee hacia abajo en cada columna.

En cualquier momento en que una persona escucha sinceramente a otra, un proceso bien creativo ocurre en el que quien escucha reconstruye mentalmente la experiencia del que habla.  Mientras más facetas de tu experiencia compartes con “oraciones con YO” fáciles de escuchar, más fácil será para tu pareja de conversación reconstruir tu experiencia acertadamente y comprender lo que estás sintiendo. Esto es igualmente importante, sea que estés tratando de resolver un problema con alguien o tratando de expresarle aprecio. Expresarte de esta manera más cuidadosa puede parecer tomar más tiempo que tu estilo usualmente rápido de comunicación. Pero si incluyes todo el tiempo que toma desenredar los malos entendidos de todos los días y trabajar con los sentimientos que usualmente acompañan el no ser comprendidos, expresarte más completamente puede en realidad tomar mucho menos tiempo.

Los Cinco Mensajes con Yo (Cinco dimensiones de la experiencia)	Ejemplo de una comunicación con Los Cinco Mensajes con Yo
1. ¿Qué estás viendo, escuchando o sintiendo?	"Cuando ví los platos en el fregadero...
2. ¿Qué emociones estás sintiendo?	...me sentí irritada y perdí la paciencia...
3. ¿Qué interpretaciones o deseos tuyos apoyan estos sentimientos?	...porque me gusta empezar a cocinar enseguida...
4. ¿Qué acción, información o compromiso quieres pedir ahora?	...y te quiero pedir que me ayudes a lavarlos ahora mismo...
5. ¿Qué resultados positivos traerá el recibir esa acción, información o compromiso en el futuro?	...para que la comida esté lista cuando lleguen Miguel y José."

 Algunos niveles más profundos de este tercer paso incluyen desarrollar el valor de decir la verdad, crecer más allá de la culpa al comprender experiencias dolorosas y aprender a hacerse amigos de los sentimientos, los propios y los de los demás también.

Reto 4. Traduce tus quejas y críticas (y las de otros) a pedidos específicos y explica tus pedidos. Para conseguir más cooperación de otros, siempre que sea posible pide lo que quieres usando un lenguaje específico, orientado a la acción y positivo en vez de usar generalizaciones: “por qué”, “no hagas” o “alguien debería.”  Ayuda a quien te escucha a llevar a cabao tu petición explicándola con un “para que...”, “me ayudaría que... si tú hicieras...” o “de manera que...” También, cuando recibes críticas y quejas de otros, tradúcelas a peticiones de acción.

Algunos de los niveles más profundos de este reto incluyen desarrollar una autoestima suficientemente alta como para que puedas aceptar una respuesta negativa y aprender a imaginarte soluciones creativas para los problemas, soluciones en las que todos consiguen al menos algo de sus necesidades.

Reto 5. Formula preguntas más abiertas y más creativas. “Abiertas…” Para coordinar nuestra vida y trabajo con las vidas y trabajos de otras personas, todos necesitamos saber más de lo que otras personas están sintiendo, pensando, queriendo y planificando. Pero nuestras preguntas usuales de “sí/ no” tienden a hacer que la gente se calle en vez de que se abran al diálogo. Para estimular a tus compañeros de conversación a que compartan más de sus pensamientos y sentimientos, formula preguntas abiertas, no de “sí/ no”.  Las preguntas abiertas permiten una amplia gama de respuestas. Por ejemplo, preguntar “¿cómo te gustó la comida/ película/ conferencia/ doctora, etc.?” evocará una respuesta más detallada que “¿te gustó?” (que puede ser contestada con un simple sí o no.)  En la primera parte del Reto Cinco se explora el formular una amplia gama de preguntas abiertas.

“y más creativas…” Cuando hacemos preguntas, estamos usando una herramienta de lenguaje poderosa para enfocar la atención en la conversación y guiar nuestra interacción con los demás.  Pero muchas de las preguntas que hemos aprendido a formular son totalmente inservibles y auto-derrotadas (por ejemplo, padres a su hija embarazada: “¿Por qué?  ¿Por qué nos has hecho esto?”)  En general, sería más fructífero preguntar “cómo” sobre el futuro, que preguntar “por qué” sobre el pasado, pero existen muchas más posibilidades creativas también.  De los billones de preguntas que podemos hacer no todas son igualmente fructíferas o esclarecedoras; no todas son igualmente buenas para resolver problemas juntos. En la segunda parte del Reto Cinco se explora la formulación de poderosas preguntas creativas de muchas áreas de la vida.

Niveles más profundos de este paso incluyen desarrollar el valor de escuchar las respuestas a nuestras preguntas, encarar la verdad de lo que otros están sintiendo.  También, aprender a sentirnos más cómodos con el proceso de mirar a una situación desde diferentes perspectivas y aprender a aceptar que las personas usualmente tienen necesidades, visiones y gustos diferentes a los nuestros (no soy una mala persona porque no me guste la comida china como a tí.) 

Reto 6. Expresar más aprecio.  Si quieres construir relaciones más satisfactorias con las personas a tu alrededor, expresa más aprecio, agrado, afirmación, estímulo y gratitud.  Dado que la vida contínuamente require que atendamos problemas y crisis, se hace bien fácil ver en la vida sólo lo que está roto y necesita repararse. Pero las relaciones satisfactorias (y una vida feliz) nos requieren notar y responder a lo que es agradable, excelente, que podemos disfrutar, al trabajo bien hecho, a la comida bien preparada, etc.  El aprecio es lo que hace una relación suficientemente fuerte para acomodar diferencias y desacuerdos.  Los pensadores e investigadores en distintos campos han llegado a conclusiones similares sobre esto: las relaciones saludables necesitan un centro de aprecio mutuo.
Un nivel más profundo de este reto se encuentra en poder cambiar nuestro nivel general de aprecio y gratitud hacia otros, la naturaleza, la vida y/o a un “Poder Superior.”

Reto 7. Haz de la comunicación mejor una parte importante de tu vida diaria.  Para tener tus nuevas destrezas de comunicación disponibles en una variedad amplia de situaciones, necesitarás practicarlas en una variedad tan amplia de situaciones como sea posible hasta que, como el guiar o correr bicicleta, se conviertan en algo natural.  El séptimo reto es practicar tus nuevas destrezas de comunicación todos los días, resolviendo problemas con otros, ofreciendo apoyo emocional a la gente importante en tu vida y difrutando de cómo te conviertes en una influencia positiva en tu mundo.  Este reto incluye aprender a ver cada conversación como una oportunidad para aumentar tus destrezas y conciencia, cada encuentro como una oportunidad para expresar más aprecio, cada argumento como una oportunidad para traducir tus quejas en peticiones y así con todo lo demás.

Un nivel más profundo de este reto concierne el aprender a separarte a tí mismo de la cultura de violencia actual (insultar y herir) y aprender la forma de crear pequeñas islas de cooperación y mutualidad.

Conclusión. Es mi esperanza que la información y los ejercicios en este manual te ayudarán a descubrir que escuchar y hablar más conscientemente y cooperativamente puede ser divertido y recompensante.  Tal y como tocar guitarra y jugar baloncesto toman gran esfuerzo y traen gran satisfacción, así hace la comunicación más cuidadosa.